Sala 002.11
A través de la obra de artistas que denuncian el eurocentrismo como herramienta de poder, esta sala cuestiona la noción heredada de «conquista». Para estos creadores, el relato histórico español tradicional en torno a aquel proceso delata la relación entre la modernidad occidental y una violencia estructural que, aplicada al dominio militar de territorios y personas, ha pervivido en el mundo poscolonial. Este binomio modernidad-violencia se traduce en desposesión de la tierra y de la subjetividad, en conflictos de género y de raza, en explotación de recursos y de personas y en el robo de la historia. Tales procesos de dominio se siguieron reproduciendo tras la independencia de las colonias, ya que las élites criollas que lideraron la emancipación impusieron modelos ajenos a los modos de vida y cosmovisiones de las poblaciones indígenas y afrodescendientes.
Estas obras señalan cómo la colonialidad articula de ese modo una lógica racista, de clase, patriarcal e imperial, marcada por la doctrina cristiana y lo heteronormativo, que borra los saberes alternativos encarnados en dichos pueblos indígenas. Las piezas de este espacio analizan así críticamente aspectos como los sistemas visuales de representación, exhibición y propaganda de la ideología colonial, la implantación del régimen heterosexual moderno o la exaltación de la supremacía blanca enmascarada en distintos niveles en la sociedad y presente tanto en las conductas individuales como en las institucionales.