Durante los últimos quince años, la fotografía ha adquirido una renovada vitalidad gracias, en parte, a su uso por numerosos artistas que no se reconocen como fotógrafos, sino que utilizan este medio para construir y desarrollar una nueva sintaxis plástica. Desde que artistas conceptuales en los años sesenta comenzaran a utilizar la fotografía tanto para documentar y registrar, o como elemento partícipe de sus proyectos, acciones y performances; este soporte comenzó a variar el sentido que le venía imponiendo la propia disciplina. Así, se liberó de ataduras formales y apuntó en otras direcciones, para convertirse en una nueva vía artística por donde circulan diferentes maneras de pensar críticamente
Jano: la doble cara de la fotografía toma el nombre del dios mitológico romano representado por dos caras que miran en direcciones opuestas y simbolizan el cambio y
Las fotografías seleccionadas no tratan del documentalismo social, ni de la identidad, ni de estereotipos, todos ellos temas comunes en la fotografía contemporánea, sino que se ocupan de las estructuras de poder en el mundo contemporáneo, su grado de importancia, cómo funcionan éstas y cómo afectan al ser humano.
La muestra ha sido estructurada en tres apartados temáticos en los que confluyen la mirada crítica de los diversos artistas: Arquitectura: poder y política; El paisaje: poder y progreso; Personas: El poder interior. Una dimensión política los traspasa y conecta con el público receptor.