Sedes y espacios

Edificio Sabatini

Fundado como Hospital de San Carlos en el siglo XVIII, toma su nombre actual de Francisco Sabatini (Palermo, Italia, 1722 – Madrid, 1797), arquitecto ilustrado encargado de su construcción. La fundación del hospital fue una iniciativa de Carlos III enmarcada en un conjunto de medidas para dotar a Madrid de infraestructuras de higiene y policía urbana. Tras una primera fase dirigida por José de Hermosilla (Llerena, Badajoz, 1715 – Madrid, 1776), Sabatini, procedente de la corte borbónica del sur de Italia, lo completó aplicando un sobrio estilo neoclásico inspirado en el renacimiento tardío.

Aunque la muerte del monarca en 1788 dejó el edificio inacabado, pronto comenzó a funcionar como hospital, permaneciendo en activo hasta 1965. Tras años en estado de abandono y diversas amenazas de derribo, su declaración como Monumento Histórico-Artístico en 1977 permitió su supervivencia y uso público.

En 1980, Antonio Fernández Alba (Salamanca, 1927) emprendió una remodelación para su uso con fines expositivos. En 1986 el edificio comienza a albergar las actividades expositivas de centro de arte para, pocos años después, en 1990, convertirse en el actual Museo. Para la rehabilitación se aprovechó el perfil inacabado del hospital: el espacio exterior reservado a un segundo patio se convirtió en una plaza pública que dio visibilidad al Museo y lo conectó con la calle Atocha; la ausencia de portada se suplió con la colocación de las monumentales torres de vidrio y acero que albergan los ascensores exteriores para permitir una circulación más fluida. Construidas por los arquitectos racionalistas José Luis Íñiguez de Onzoño (Bilbao, 1927) y Antonio Vázquez de Castro (Madrid, 1929) en colaboración con el arquitecto británico Ian Ritchie (Sussex, Reino Unido, 1947), estas torres son una de las señas de identidad del Museo.

El interior despliega en torno a un patio amplias galerías abovedadas sostenidas por pilastras de piedra y salas de exposición, con vanos abiertos hacia el exterior y hacia el patio, que permiten regular la iluminación natural. El edificio contiene asimismo espacios alternativos, como son los sótanos de ladrillo abovedados o la sala de protocolo, antigua lencería del hospital con el mobiliario original, a los que se ha dado un uso expositivo.

Sede Sabatini

Edificio Nouvel

En 1999 se convoca un concurso internacional para la ampliación del Museo Reina Sofía, al que se presentan propuestas de arquitectos como Juan Navarro Baldeweg, Dominique Perrault, Zaha Hadid, Enric Miralles y Tadao Ando, entre otros. En 2001 se pone en marcha el proyecto ganador, firmado por el arquitecto Jean Nouvel (Fumel, Francia, 1945). Desde su origen, el edificio se plantea, en palabras de su autor, a la sombra del Reina Sofía, es decir, al servicio del Edificio Sabatini, cuyas funciones expande y completa al tiempo que mantiene el protagonismo de la sede original. En junio de 2005 queda inaugurado el complejo del Edificio Nouvel, que comprende dos amplios espacios expositivos, biblioteca y centro de documentación, librería, oficinas, café-restaurante, sala de protocolo y dos auditorios con capacidad para 200 y 400 espectadores respectivamente.

El conjunto arquitectónico se adapta a la fachada suroeste del Edificio Sabatini y al solar triangular que le precede. En él, Nouvel respeta el emplazamiento de tres edificios preexistentes para la construcción de tres nuevos módulos. Aunque exentos, quedan comunicados entre sí y con el Edificio Sabatini en diversos niveles: a través de un gran alero superior que conecta con la cornisa del hospital y refleja el flujo de la ciudad mediante las formas convexas de aluminio lacado en color rojo, mediante pasarelas elevadas entre los edificios, y a través de una plaza semipública que dialoga con el entorno urbano. Funciona así como conector de diversas zonas de la ciudad (Estación de Atocha, Ronda de Atocha, barrio de Lavapiés), y evoca el patio de Sabatini en su doble naturaleza de espacio íntimo y diáfano.

Desde su inauguración, el flujo de visitantes se vertebra de manera plural, dado que el nuevo edificio proporciona una entrada alternativa y cuenta con diversas conexiones entre las galerías de Sabatini y los nuevos espacios de Nouvel, una distribución que genera diversos itinerarios posibles e impone una neta distinción entre zonas de servicios y espacio expositivo.

imagen del Edificio Nouvel

Palacio de Cristal

El Palacio de Cristal es una de las dos sedes expositivas del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía en el Parque de El Retiro de Madrid. Fue concebido originalmente como invernadero para la Exposición de Flora de las Islas Filipinas (1887), colonia española por aquel entonces, y su diseño, a cargo del arquitecto Ricardo Velázquez Bosco, refleja a un tiempo el impacto de los materiales de construcción más vanguardistas de la época y la historia del colonialismo del siglo XIX.

Las columnas de hierro colado, combinadas con grandes superficies de cristal, y su planta diáfana resultan de gran monumentalidad, y fueron, en su época, muy novedosas. Durante la Exposición de 1887, el Palacio de Cristal presentaba especímenes de vegetación exótica enmarcados en un contexto arquitectónico técnicamente innovador, una fusión destinada a producir una imagen de fantasía e irrealidad en los visitantes.

Tras la exposición de 1887, el Palacio de Cristal se utilizó como sede de la Exposición Nacional de Bellas Artes que durante un tiempo se celebró con regularidad. Desde 1990 alberga proyectos e instalaciones específicas de artistas contemporáneos.

Sede Cristal

Palacio de Velázquez

El Palacio de Velázquez (1883) es, junto al Palacio de Cristal, una de las dos sedes expositivas del Museo Reina Sofía en el Parque del Retiro de Madrid. Toma su nombre del arquitecto Ricardo Velázquez Bosco, quien también colaboró en la construcción con el ceramista Daniel Zuloaga y el ingeniero Alberto del Palacio.

El edificio, cercano al historicismo neorrenacentista, es de planta amplia, cubierta con bóvedas de estructura de hierro y con iluminación natural, gracias a la superficie acristalada. Concebido como pabellón principal de la Exposición Internacional de Minería, Artes Metalúrgicas, Cerámica, Cristalería y Aguas Minerales de 1883, sigue el modelo que Joseph Paxton estableció en el Crystal Palace de Londres en 1851.

Desde 1987 ha acogido exposiciones monográficas de artistas como Cindy Sherman, Nan Goldin, Juan Muñoz y José Manuel Broto, junto a otros muchos. Cerrado por reformas en 2005, volvía a abrir sus puertas en 2010 con una retrospectiva dedicada a Miralda.

Palacio de Velázquez