Sala 205.07
Gecé: el inspector de alcantarillas

Ernesto Giménez Caballero, Gecé, «empresario o contratista de asuntos poéticos» según su propia definición, es un personaje fundamental para entender el arte moderno en España y la importancia que las revistas alcanzaron en el periodo anterior a la Guerra Civil como plataformas para la difusión de las vanguardias.

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Ernesto Giménez Caballero, Gecé, «empresario o contratista de asuntos poéticos» según su propia definición, es un personaje fundamental para entender el arte moderno en España y la importancia que las revistas alcanzaron en el periodo anterior a la Guerra Civil como plataformas para la difusión de las vanguardias.

Autor de un abundante corpus literario y de crítica, fue fundador de La Gaceta Literaria, del Cineclub Español y de La Galería; editor, organizador de exposiciones y conferencias en torno al libro y los escritores, director de cine y autor de una singular obra artística, los Carteles literarios.

La fecha de inauguración de la Generación del 27 es el mismo año en el que se funda La Gaceta Literaria, auténtico vademécum de todas las experiencias culturales de esta generación descentralizada. Giménez Caballero generó una amplia red de colaboradores en torno a su figura que aportan una visión plural en la que entraban todas las modernidades. Su posterior giro personalista hacia posiciones fascistas lo llevaron al aislamiento y a la enemistad con muchos de sus antiguos colaboradores. Convertido en «Robinson literario» redactó íntegramente los últimos números de la revista, que dejó de publicarse en mayo de 1932.

Artísticamente favoreció a la nueva generación del «arte nuevo» vinculados a la Sociedad de Artistas Ibéricos. Entre los colaboradores de la revista estaba Maroto, que diseñó el logo y la cabecera de la revista, Maruja Mallo o Francisco Mateos. Favoreció también la arquitectura racionalista, como en su tienda-librería La Galería, un espacio concebido por Mercadal en el que vendía muebles de tubo metálico, en uno de los cuales se hace retratar. De su amistad con el arquitecto Aizpurúa surgió su participación en la Exposición de Arquitectura y de Pintura Modernas de San Sebastián de 1930.

En 1928 funda el Cineclub con la colaboración de Luis Buñuel, quien firmó también las reseñas de sus actividades en la revista. Su interés por el cine le llevó a dirigir dos cortometrajes de corte vanguardista: Esencia de Verbena, en el que participa Ramón Gómez de la Serna y Noticiario de Cineclub (ambas de 1930), retrato de los colaboradores de la revista y en las que aparecen personalidades de la cultura como el propio Salvador Dalí y Vicente Escudero.

El origen de los Carteles literarios, obras fundamentales de la vanguardia y que presentamos en esta sala, tiene que ver con su trabajo como crítico literario en el diario El Sol. Publicados por primera vez en su libro Carteles, son un arte híbrido, la expresión literaria de lo que la plástica había resuelto ya por medio del cartel, una herramienta que consideraba positivamente como «pintura industrial». Estos trabajos se expusieron en Madrid en 1927 y al año siguiente en las Galeries Dalmau de Barcelona. Lluís Montanyà, en su crítica a la exposición publicada en L’Amic de les Arts los describió como esquemas gráficos de un libro, de una obra o de la personalidad de un escritor que funcionan como una nueva forma de crítica, con valor intrínseco.

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